No sé si os pasa como a mí, pero cuando llega la temporada de calçots siempre hay alguien que me da la brasa para que le diga dónde se comen los mejores.
Este año me la han dado los colegas Gastronomistas y han conseguido que comparta con ellos y con cuantos nos leéis una lista de cinco lugares donde descubrir o redescubrir el calçot. Una tradición que muchos tienen por casi bimilenaria, pero que, como dijo el chef televisivo Marc Ribas en la presentación de la Slow Food Barcelona Guide, “apenas tiene 50 años” tal y como la conocemos hoy.
Así pues, si os dan la brasa con lo de dónde-debo-comer-calçots, he aquí nuestro top 5 de calçotades para 2020:
1. El clásico: Cal Ganxo
Empezamos por un clasiquísimo de la comarca en la que nació este producto y esta tradición, el Alt Camp, en la provincia de Tarragona.
Cal Ganxo es una enorme masía equipada al 100% para que disfrutéis de la calçotada que imagináis. Pero su maña para asar los calçots, etiquetados con el sello de calidad IGP Calçot de Valls, es legendaria y nunca falla.
Los calçots se acompañan de butifarra y de carne a la brasa, y de otro icono de la temporada: las alcachofas.
Cal Ganxo
Carrer de la Font F, 14. 43813 Masmolets (Tarragona)
Tel. 977 60 59 60
www.calganxo.com/calcotada/
2. El take-away: El Rebost de Ponent
La mancha del calçot ha superado ya los límites de su Alt Camp originario y ha llegado a los confines de Catalunya. Tal es la locura. De eso se dio cuenta el hortelano Jordi Llanes, de Castellnou de Seana, en la comarca leridana del Pla d’Urgell. Y tuvo la idea de plantar calçots en su huerta, luego, a petición de sus clientes, empezó a venderlos asados en plan take away. Se las ingenió con una parrilla gigante y giratoria que rinde como la que más. Y para la salsa, reprodujo la receta de la familia de su mujer. Y a pesar de estar a más de 150 km de Barcelona, no le faltan clientes de la Ciudad Condal: bien envueltos en papel de periódico, los calçots pueden llegar calentitos a cualquier comedor del Eixample.
Ahora va a hacer cuatro años que a este servicio, Jordi le añadió el de un restaurante convencional. Eso sí, especializado en calçotades y que solo abre en temporada de esta hortaliza. Incluso adaptan el típico menú de calçotada a las personas con celiaquía.
El Rebost de Ponent
Camí de Bellpuig, s/n. 25265 Castellnou de Seana (Lérida)
Tel. 637 812 030 / 608 652 521
www.elrebostdeponent.com
4. El distinguido: El Trispolet
Cuando el concurso de TV3 Joc de Cartes dedicó un programa a los mejores restaurantes de calçots del Alt Camp, el Trispolet no ganó, pero todos sus competidores alabaron la energía, las ganas de trabajar bien y, a pesar de no ser los primeros, el resultado de este restaurante del centro de Valls, la capital de la comarca de los calçots. No sabemos si el adjetivo de distinguido era el más exacto para este establecimiento, pero la verdad es que se aleja un poco de las masías previsibles y que, junto a su menú de calçots (bastante tradicional, demanda obliga) disponen de una carta propia de cocineros jóvenes con talento.
El Trispolet
Muralla de Sant Antoni, 20. 43800 Valls (Tarragona)
Tel. 977 61 48 69
www.eltrispolet.com

4. El japonizado: L’Antic Forn (Cervera)
Este es un viejo amigo de Gastronomistas, ya hablamos de él en este post de junio de 2017. Para buscar una calçotada realmente de plan B, que nos aleje de los restaurantes ruidosos y nos evite tener que colgarnos un babero (hay quien no lo soporta, en serio), os proponemos que probéis el arroz del delta del Ebro con alga kombu y kimchi casero de calçots, que nuestro anterior post ubicó en “un estilo inesperadamente healthy que todo el mundo busca en Barcelona, pero que se sirve en Cervera.” Las cosas como son, su chef, Sergi Ortiz, es a la vez un loco de la cocina japonesa, un abanderado del producto de km 0 y un maestro en las brasas que enciende cada día en este antiguo horno. Y así le salen sus calçots y nacen platos como éste.
L’Antic Forn
Plaza Major, 18. Cervera (Lleida).
Tel. 973 53 31 52
5. El barcelonés: L’Antic Forn (Barcelona)
Ya es complicarse la vida escoger dos restaurantes que se llaman igual, pero que no son el mismo, para listar en un mismo post. Pero bueno, el segundo Antic Forn nos ha parecido imprescindible para responder la cansina pregunta de ¿dónde comer calçots en Barcelona? Por lo menos en este caso, la calçotada indoor que ofrecen en el corazón del Raval es muy recomendable. Consiguen sus calçots en el Prat de Llobregat y los asan, obvio, en su propia parrilla junto con las carnes y las verduras del menú de calçotada que ofrecen en temporada. Porque aquí tienen opción carnívora y veggie, que sin las dos, hoy en día, en el Raval, no eres nadie.
L’Antic Forn
Pintor Fortuny, 28, 08001 Barcelona
Tel. 93 412 02 86
www.lanticforn.com
Hola, a esta lista le añadiría el restaurante L’esportell del Bou en Picamoixons . Si lo visitáis, repetiréis 🙂
Gracias por tu aportación, Albert. La tendremos en cuenta.